DAME MÁS TELE: El error de Argi, y la primera piedra

La concursante vizcaína desata la polémica con un comentario sobre ETA

Parecía una noche más en la casa de Guadalix. Los concursantes se preparaban como siempre para su enésima fiesta temática semanal esperando pasar una noche agradable de asueto y evasión. En los momentos previos a la celebración de la misma, varios de los habitantes de la casa comentaban entre ellos sus vivencias en manifestaciones, pues la fiesta versaba sobre ese tema. En un momento de la conversación, la concursante vizcaína afirmó que la única manifestación a la que había asistido era una en la cual se pedía la vuelta de la banda terrorista ETA a las armas. No obstante y ante el asombro y la estupefacción de sus interlocutores, la joven vasca se apresuró a aclarar que se trataba de una broma y a pedir disculpas por su desafortunado comentario.

Este episodio, que en nuestro entorno diario no hubiera pasado de la mera anécdota y que de hecho, dentro de la casa se ha diluido sin que se le de mayor relevancia, ha servido no obstante para que las hogueras de la España más inquisitoria vuelvan a prender con ansias de 'justcia'. Nada más conocerse el suceso, los 'fans' del programa, a través de las redes sociales (especialmente twitter), clamaban venganza e incluso la AVT (Asociación de Víctimas del Terrorismo) reclamaba oficialmente la expulsión disciplinaria. "El que la hace la paga" debieron pensar todos aquellos que se lanzaron con tremendo frenesí hacia una nueva caza de brujas. Y es que ya sabe que los españoles nunca entendimos realmente el pasaje bíblico en el que Jesús afirma "el que este libre de pecado, que tire la primera piedra", aquí en cuanto podemos la arrojamos y si es a la cabeza, mejor.

Porque claro, que fácil es elegir como diana a una joven muchacha que aparece en televisión, señalarla con el dedo y lanzarla a los leones por un comentario inadecuado en el contexto de una charla informal. Lógico que suceda en un país en el que cuando nos tomamos una caña con los amigos, jamás hacemos chistes de maricones, jamás nos reímos del chino que vende rosas por los bares, jamás hacemos comentarios sexistas, racistas o xenófobos. Nunca en la vida se nos ocurriría decir "si Franco levantara la cabeza" o "joder con los putos moros". Cuando vemos un partido de fútbol nunca decimos "puto negro" a un jugador del equipo contrario o comentamos "que se jodan los americanos por listos" cuando en E.E.U.U sufren un atentado.

Una vez más, nuestra respetuosa y cívica sociedad, se erige en autoridad moral colectiva con el derecho de estigmatizar a todo aquel que conscientemente o no, cruce determinadas líneas rojas que nosotros mismos cambiamos y adaptamos a nuestro antojo. Los mismos que critican a los concursantes de GH por actuar de manera impostada son ahora los que crucifican a una muchacha por cometer un error en un contexto de absoluta naturalidad y desenfado. Los que están llenos de pecados, son los primeros en lanzar las piedras sobre el indefenso. En definitiva Argi es la enésima víctima de nuestro  histórico fariseísmo, de nuestra obsesión por castigar el patinazo ajeno, de nuestro enfermizo cainismo. Desde 'Dame más tele' queremos mostrar nuestra solidaridad con esta concursante y hacer una defensa del error, que es la base de todo aprendizaje. Seguro que Argi aprenderá de esta experiencia aunque dudo mucho que los que la están fustigando lo hagan, pues ya estarán buscando a su próxima víctima.